Capítulo 23

Una semana después...
[Narra Irene]
Echo la cabeza para delante y a continuación hacia detras, así es cómo me peino yo. Visto mi cuerpo con la sudadera de Batman que tanto me gusta ponerme y unos leggins color negro. Me despido de mi madre y bajo por las escaleras a toda prisa. Me los encuentro en la acera de enfrente.
-¿Qué tal, chicos? -les doy dos besos a cada uno, durante el proceso me percato de que falta alguien. -¿Y Harry, ha dado por fin señales de vida?
-No nos coge el teléfono, nuestro mánager tiene una casa por Marratxí; tampoco está ahí -contesta Liam.
-Dios mío, ¿qué coño le pasa a este tío? -protesto indignada, me cabrea esta situación.
-Pero en fin, no todo son cosas malas -exclama Patri.
-¿Creías que no nos acordaríamos de tu cumpleaños? -secunda Zayn.
-¿Os habéis acordado?- sonrío.
-Claro, ¿cómo nos vamos a olvidar?- dice Mary.- te hemos.preparado una sorpresa.
-¿Qué sorpresa?- digo dando saltitos y aplaudiendo.
-Es sorpresa. Ven.- Niall me agarra dr la mano y me arrastra hasta la esquina de la calle. De su bolsillo saca unas llaves.
-¿Me has comprado un coche?- digo entre risas.
-No.- ríe.- va chicos, subir.- todos subimos al coche; Lou al volante.
-¿Dónde vamos?- pregunto inquieta.
-Ya te hemos dicho que es sorpresa.- Niall sale de detras de los asiento y me tapa los ojos con una benda. Media hora después llegamos al lugar. O eso creo.
Bajamos del coche y caminamos hacia algún lado.
-¡Llevadme bien eh! Que no me quiero caer.
-Sí tranquila.- creo que voy agarrada del brazo de Niall.
-¿Ya me la puedo quitar?
-¡No!- gritan todos.
Caminamos un poco más y paramos.
Alguien me quita la benda. ¡Wow! ¿Es un campamento? Sí, sí lo es. Siempre he querido ir a uno pero nunca he tenido ocasión.
-Dios chicos esto es... es...
-Impresionante.- Patri termina la frase.
-Y lo mejor es que estaremos solos. Les hemos pedido que si nos lo dejaban hoy y mañana para nosotos. Aunque hemos tenido qur pagar más. Pero no importa.- explica Liam.
-Sois los mejores. ¿Y el pijama? No lo he traído...
-Yo te he traído uno.- dice Mary.
Todos entramos en el recinto y nos dispersamos en dos de las ocho cabañanas que rodean una hoguera que ahora está apagada. Salimos de estas y nos dirigimos a la zona donde se encuentran los animales.
-¡Mirad, cerdos!- todos corremos a mirarlos.
-Qué mono, es un bebé.- dice Nico señalando a una cría de cerdo.
-Aquí hay cabras.- informa Patri.
-Bdeaaaaah.- Nico intenta imitar el sonido de este.
-Bdeaaah.- empezamos a gritar todos. "Jajaja, qué cabezas" pienso.
Seguimos investigando aquel terreno, encontramos un lago.
-Este sitio es precioso -exclamo boquiabierta.
-¿Te gusta? -me pregunta Niall.
-¿Que si me gusta? ¡Es perfecto! -los abrazo a todos y cada uno.
Sin darnos cuenta, se nos ha hecho casi de noche. Nos sentamos alrededor de la hoguera para tostar una cuantas nubes, qué delicia.
-¡Es la hora! -grita Liam.
-¿De qué?
-¡La hora de las canciones! -sale de una de las tiendas de campaña con dos guitarras españolas, una en cada mano.
Cantamos todas y cada una de sus canciones, era como un sueño; pasar mi cumpleaños con 1D...
Pasan las horas, y ya todos los chicos decidimos irnos a dormir.

Al posar mi cabeza sobre el saco caigo rendida al instante, pero me desvelo tiempo después; una vez despierta, ya no consigo conciliar el sueño. Necesito airearme, salgo al exterior y me encuentro con...

-Niall, ¿qué haces aún despierto a estas horas? -está tocando suavemente la guitarra.

-Lo mismo te digo -ríe.

-No podía dormir.

-Ni yo tampoco, he decidido salir a tocar un poco.
-Bueno, yo me iba a dar una vuelta por aquí cerca, así que...

-Siéntate -me ordena.

-¿Cómo dices?

-Que te sientes -acabo sucumbiendo.

-¿Qué pasa? -se acerca a mi para cantarme mientras empieza a tocar los acordes de uno de sus temas, ¡Little Things!; me susurra la letra a la oreja.

Nos quedamos en silencio durante minutos, mirándonos; no hacen falta las palabras.

-¿Cómo...? ¿Cómo has sabido que era mi canción favorita?

-Les pedí consejos a tus amigos, ellos me lo dijeron.

-Vaya, yo... no sé qué decir, es... -otra vez el silencio. -Bueno, creo que... tal vez tenga que... -me levanto.

-Sí, yo también debería... -nos dispersamos con timideza, poco a poco.
¿Qué significado tiene lo que ha pasado?